Todo cambia, todo permanece

Estas cosas pasan, cuando, acostumbrado a vivir en el país de las telecomunicaciones, de repente te instalas en un país en el que Internet aún es un proyecto a consolidar, un paso muy grande que queda por dar. Así que no es raro, que una vez que hayas escrito todo el relato para introducirlo en el blog, en el momento en que pulsas "publicar", se produzca un error y pierdas todo el texto y tengas que volver a escribirlo, esto es Cuba y aquí hay carnaval. Lo único que me da pena es que me había salido un relato muy interesante de lo que sentía en estos momentos, y siempre pasa, que cuando tratas de reescribirlo, pierde un poco de autenticidad, pero intentémoslo y espero que salga algo bueno. Ahí vamos.
Hoy es un día bueno, muy bueno, estoy con la moral alta, muy contento y con los pies sucios. Acabo de salir de un examen, historia del cine decía el título, y yo creo que me ha salido muy bien, estoy contento con todo lo que puse. La verdad es que tenemos un profesor increíble, y da pena que ya se haya acabado el taller, porque consigue que aprendas y estudies sin que te des cuenta de que lo estás haciendo, te descubre un mundo nuevo y te motiva mucho para seguir adelante en los estudios, por eso me pareció incluso divertido el examen. No tiene nada que ver con los exámenes de la facultad de Madrid en los que te preguntan la fecha de tal película o datos absurdos que no sirven para nada, aquí te hacen pensar, reflexionar y luego intentar escribir las conclusiones que has sacado por ti mismo. Solo fueron tres preguntas, proyectó la primera secuencia de Ciudadano Kane, en la que los padres "venden" a su hijo a un banquero, y teníamos que relacionarla con un texto que escribió André Bazin sobre la película, la segunda pregunta era sobre la Nueva Ola francesa, y la tercera y última analizar el tiempo en la película ´El Espejo´ de Andrei Tarkovsky, una película increíble que tenéis que ver, el tema de la peli es un tipo en el lecho de muerte recordando toda su vida, es increíble de verdad, una cosa preciosa. Para que veáis las diferencias nos deja tener los apuntes si queremos encima de la mesa, porque realmente no sirven de mucho, ya que quiere que pienses y hagas una especie de ensayo.
Ayer tuvimos fiesta de disfraces de Halloween (así de surrealista es la escuela, celebramos Halloween antes de tiempo en un país en el que la cultura yankee está crucificada, celebramos Halloween el día antes de un examen, celebramos Halloween y nadie va disfrazado de personajes de miedo, yo iba de Fernando Birri, fundador de la escuela, y fue un buen disfraz en opinión del populacho eiceteviano) y hoy fue genial, por primera vez desde que mis pies pisan suelo cubano ha amanecido lloviendo, y aquí cuando llueve parece que el mundo se está cayendo encima de uno, ha llovido durante horas, parecía el preludio para la hecatombe de un examen de historia del cine imposible, pero ya vi que lo interpreté mal, porque fue un examen buenísimo, y ya paró de llover, y ahora nos envuelve el mundo de los olores, porque la escuela está llena de flores que huelen que no es normal, te envuelven en el aroma y no te sueltan durante un día entero (mariconazo piensan algunos).
La escuela está a 40 km de La Habana, y a 5 km de San Antonio de los Baños, un pueblecito perdido en el mundo, es decir, estamos en mitad del campo, rodeados de palmeras, plataneros y pura naturaleza, un sitio increíble, algo escondido del mundo. Está muy bueno, las temperaturas no son tan exageradas como en La Habana, donde el calor es brutal, y el calor humano también. Tenéis que ver los atardeceres en La Habana, el sol se pone por el malecón, encima del mar, y envuelve todo de colores, el cielo y el agua, está genial, y ahora más, que se aproxima el invierno y el mar te avisa, ya que rompe brutalmente contra las piedras del malecón, inundando la carretera, aunque ahí están algunos valientes que se sientan en el malecón para notar las olas rompiendo contra ellos mismos, los cubanos son gente muy especial. Los atardeceres en la escuela son preciosos, y la noche llena de estrellas, un cielo muy limpio, una luz muy especial, pero lo mejor son los amaneceres, el sol sale por encima de las estatuas de Birri, Ford Coppola, García Márquez y otros personajes ilustres, además son estatuas muy reales, que dan la impresión de que se van a poner a hablarte en cualquier momento, así que es buenísimo ver el amanecer sentado junto a semejantes maestros. Pero volvamos un poco a la realidad.
Ya hemos terminado los talleres de guión y de historia del cine, ahora estamos con dirección por las tardes y el lunes empezamos el de producción por la mañana. El profesor de dirección es todo un personaje, argentino, amigo de Fito y de Calamaro, así que echamos muchas horas en la cafetería hablando de música, de Calamaro, Sabina y demás poetas guitarreros, hemos conectado muy bien. Sus clases están muy bien, porque prefiere que trabajemos con ejercicios prácticos, por lo que estás divirtiéndote mientras aprendes, de verdad que a la facultad española le queda mucho por aprender.
Por otra parte el jueves acabó el campeonato de fútbol, fuimos segundos detrás de los compañeros de segundo, valga la redundancia, pero estuvo muy linda la final. Hubo un momento en el que valió la pena, soñamos por unos minutos, tiré una falta a falta de cinco minutos para que acabara la final y el balón milagrosamente entró, empatamos el partido y todos los compañeros de primero invadieron el campo, soñamos durante unos minutos, ya nadie se acuerda de los tres goles que nos marcaron después, de esas cosas ya nadie se acuerda, pero que bueno fue ese momento, todo primero en la cancha abrazado.
Hay una lagartija en mi mesa y una rana en el suelo, como veis esto es otro mundo.
Me acaba de llegar un mensaje de Luisón y otro de mis padres, desde pirineos, como me gusta saber que la vida continúa en ese otro lado del mundo.
Bueno ya me despido, que sale la guagua hacia la Habana y creo que está la familia Laorden con un paquetito para mi made in Torrelodones.
Antes decir que Lucas ya se fue, que bueno fue tener la compañía de mi primo en la escuela, él también disfrutó mucho, y estuvo bien poder hablar de tantas cosas, conocernos un poco mejor, y hacer proyectos de escritura juntos. Le dio pena marcharse, pero seguro que ahora andará gozando por Guatemala, y todos los destinos que le quedan, nos veremos en Madrid o en cualquier parte del mundo.
Os mando un millón de abrabesos rumbo transatlántico, se os quiere y recuerda.
En diciembre podremos palparnos y lamernos las orejas, y se hará.
Je suis lé Pabló